Mueve las patas -

Mueve las patas es una empresa especializada en el adiestramiento canino y como establecimiento de servicio. Ubicada en la dirección , esta compañía ofrece soluciones personalizadas para satisfacer las necesidades de tus mascotas.

Una de las características más resaltantes de Mueve las patas es su enfoque en el bienestar y la educación de los perros. Su equipo de profesionales altamente capacitados trabaja arduamente para brindar un servicio de calidad y garantizar resultados satisfactorios.

Si estás buscando un adiestrador canino confiable y efectivo, Mueve las patas es la opción ideal. Con años de experiencia en el campo, han demostrado ser líderes en el adiestramiento de perros. Su metodología se basa en el respeto y la comprensión de las necesidades individuales de cada animal, lo que garantiza una relación armoniosa entre el perro y su dueño.

Además, Mueve las patas cuenta con excelentes reseñas y opiniones de clientes satisfechos. Actualmente, tienen una opinión media de 5/5 según Google My Business, lo que refleja su compromiso con la satisfacción del cliente.

La ubicación de Mueve las patas es estratégica y fácilmente accesible. Si deseas obtener más información sobre sus servicios, te recomendamos visitar su página web: muevelaspatas.com. Allí encontrarás detalles sobre sus especialidades, precios, horarios y mucho más.

En caso de que desees contactar a Mueve las patas, puedes hacerlo a través del siguiente número de teléfono: 622877174. Su equipo estará encantado de atender tus preguntas y proporcionarte asesoría personalizada.

Opiniones de Mueve las patas

Leticia López

5/5

Recurrimos a Sara porque no conseguíamos que Lila dejara de hacer sus necesidades en casa. No entendíamos cómo sacándola varias veces al día y quedándose ella en casa sola tranquila durmiendo en el sofá, todos los días al volver de trabajar a medio día y por la tarde nos encontrábamos con el pis y la caca. Pasaron dos años así, y no sabíamos qué hacer hasta que un día vimos la tarjeta de Sara en una tienda de animales y le escribimos.
Sara enseguida se citó con nosotros en nuestra casa y se informó de las condiciones de vida de la perra: dónde vive, dónde duerme, los juguetes que tiene, cuánto come, cuánto y cuando sale… La conclusión que ella sacó fue que a Lila no le gustaba estar sola, y esa era su manera de protestar. Ella nos propuso introducir unos cambios sencillos en la rutina diaria que nosotros pudimos aplicar enseguida y así Lila dejó de hacerse caca en casa de un día para otro.
Trabajar con Sara fue muy sencillo porque además de venir a casa, está disponible por whatsapp para consultar dudas o explicarte algo de nuevo.

Marina Rodriguez

5/5

Laura Prados

5/5